sábado, 8 de febrero de 2014

ALAS DE ANGEL NEGRO

Negras velas
negras siluetas
acunando mareas
arrastrando dolor
Grito rencor
grito sinsabor
un revuelo
de mariposas
alrededor
Eres angel
eres demonio
maldito veneno
que extingue
mis sentimientos
Y mas allá
en el tiempo
confecciono un retal
de ilusiones sin pensar
bailando en tu mirar
Alas de angel negro
poderoso señuelo
ligero como el viento
me acompañas
en este encierro
Me envuelves
me matas
dame tu luz de plata
quiero descansar
en esa ensenada
No siento nada
culebras recorren
mi espalda
sensaciones de esclava
de esta tortura
que la vida me arrebata
Lucho sin fuerzas
lucho con un murmullo
de amor
te siento angel negro
en mi interior
pero cuanta lúz
refleja ese corazón
que lucha
con una sola razón
aún existe el AMOR.

HAY PREGUNTAS FACILES Y DIFILES DE CONTESTAR





Hay preguntas tan fáciles que a veces no se como responder, porque me faltan palabras. O quizá me sobren.Un día me encontré con el mar, y nos quedamos charlando.Le pregunté sobre mi duda, pero él seguía en lo suyo, yendo y viniendo.Cuando me alejé de él, para volver a la vida de cada día, los ecos de nuestro encuentro resonaban en mi corazón.Me volví hacia donde estaba, y sus palabras se grabaron en mí:
“Necesito ser transparente, me decía, porque quiero que disfrutéis de mi fondo.
Las maravillas que hay dentro de mí, son para vosotros.
Por eso cuando aparece la basura, me tapa, me oculta, no soy yo.
Necesito las rocas, quiero chocar contra ellas, quiero que me devuelvan a donde vengo, pero distinto.
Con cuanta más fuerza, mejor.Luego mis aguas se remansan mucho más tiempo y llegan más lejos.
Y qué me dices de la brisa, parece que no se nota, pero está ahí.
Es la caricia de mis aguas, es la que me hace ser diferente cada día aunque mis aguas lleguen siempre al mismo sitio.
La brisa me hace sentir cada momento como una oportunidad nueva.
Cada una de mis pequeñas olitas que ves a lo lejos, es la sonrisa de sentirla cerca.Por último está la playa.
 Ahora soy yo quien acaricio.Me llevo pequeños recuerdos y ella también hace sus hoyos para quedarse con alguna parte de mí. Y nos mezclamos.
Cada vez que caigo en ella, parece que allí me quiere atrapar, pero siempre me suelta…
Cada una seguimos nuestros caminos y mientras ella parece inmóvil, yo me llevo alguna de sus arenas a lo largo del mundo.

Mira el horizonte allí te está esperando siempre un nuevo día, un nuevo amigo, una nueva vida”.